Ingredientes:
– Un madrugón diario a las 6:30h
– Una lavadora puesta y tendida antes de las 08:00h
– Dos peques despiertos, desayunados, vestidos y listos para el cole.
– Una comida preparada, cinco recados resueltos.
– Dos luchas porque las fieras hambrientas se acaben el plato.
– Dos páginas del libro de matemáticas y una de lectoescritura.
– Dos viajes (ida y vuelta) al cole por la tarde.
– Una odisea para llegar a tiempo en bus a la actividad extraescolar de la tarde cargando con dos fieras desatadas, la mochila del mayor, los juguetes del pequeño, la bolsa de tenis, la raqueta, las meriendas y tu bolso.
– Una hora de espera de pie mientras Príncipemayor emula a Rafa Nadal.
– Dos viajes al baño (en la otra punta del club de tenis) en media hora porque a Príncipepequeño no le da la gana de hacerlo todo a la misma vez.
Cargar todos los ingredientes sobre dos riñones humanos. Esperar a que lleguen las 19:00h.
Opcional: aderezarlo con un lumbago que arrastras desde hace una semana.
¡Listo! Ya tienes tus riñones al Jerez.
Afortunadamente para el regreso a casa, baños y cenas ya han llegado los refuerzos. De otra manera, los riñones se te pasan y ya no tiene arreglo.
¡Buen provecho!